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El
funeral de un ser querido es uno de los
momentos más duros que enfrenta una familia,
el dolor es tan grande que no nos permite
agradecer a las personas conocidas o
desconocidas que se solidarizan con nuestra
pérdida y tristeza.
Sin embargo, no podemos rendirle mejor
homenaje a nuestro ser
querido fallecido, que agradecerles en
su nombre a todas aquellas personas que
asistieron a su velorio y lo acompañaron
hasta su última morada.
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Existes muchas maneras de agradecer a los
asistentes a un funeral. Podemos
expresar nuestra gratitud a través de
comunicados periodísticos, radiales o
televisivos, y también a través de cartas o
tarjetas personales.
Generalmente, las tarjetas ya incluyen un
mensaje de agradecimiento, por lo que sería
mejor escribir con nuestras propias palabras
una nota o
carta de agradecimiento.
¿Cómo
elaborar las cartas o tarjetas? Podemos
escribirlas a mano o redactarlas en un
ordenador e imprimirlas. Utilice un papel
blanco y trate de imprimir o colocar una
fotografía del ser querido fallecido.
Respecto al contenido de la
carta o tarjeta se debe incluir una
breve descripción del difunto en las
diferentes etapas de su vida.
Si recuerda alguna anécdota entre el
fallecido y la persona que
asistió al funeral no olvide contarla en
su carta, así podrá relacionar su gratitud
con una experiencia que compartieron.
A continuación ofreceremos un ejemplo de
carta de agradecimiento por haber asistido a
un funeral:
Lima, 11 de julio de 2014
Sr. Víctor Mantilla
Lima
Estimado Señor Mantilla
La primera vez que intenté escribirle esta
carta se me hizo muy difícil, pues vinieron
a mi mente tantos recuerdos con mi padre
Tito y las lágrimas me nublaron los ojos.
Sin embargo, cuando recordé las historias
que mi padre me contaba sobre su amistad con
usted logré serenarme y hasta esbozar una
sonrisa.
Mi padre siempre nos hablaba de usted, de
sus aventuras de adolescentes y su
reencuentro, muchos años después, cuando ya
estaban casados. Por eso el día que lo vi en
el velorio me reconfortó saber que mi padre
no se equivocaba cuando nos decía que usted
era como su hermano y que sabía que usted
nunca lo defraudaría. Me llena de orgullo
saber que mi padre fue un gran hombre, que
tuvo la dicha de compartir con grandes
amigos como usted. Y estoy segura que usted
sabe, al igual que yo, que mi padre fue un
buen hijo, un buen hermano, un buen esposo,
un buen padre y un buen amigo.
Debo confesarle que cada vez que me
encuentre con usted en la calle me hará
recordar a mi padre y sentir que nunca se
fue. Gracias por acompañarme ese día tan
triste para mí, mi madre y mis hermanos. Que
Dios lo bendiga hoy y siempre.
Con mucho afecto,
Adriana Gonzales
En resumen, como dice un dicho popular: sólo
se sabe que una persona es querida en su
comunidad el día que se
celebra su funeral. Por ello, los
familiares del ser querido fallecido deben
recordar que no hay mejor manera de
homenajear al difunto que agradecerles de
forma personal o con una carta a todas las
personas que asistieron a su funeral.
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